5.7.06

COMPETICIÓN

Se que he estado más tiempo del normal sin publicar. Todo tiene una explicación.

Como siempre, pensé en ofreceros algo que os hiciera sonreír un poco: alguna anécdota, una historia de esas que siempre me pasan... Ávidamente busqué a mi alrededor: cogía el autobús y miraba a los que me rodeaban. Iba al gimnasio y montada en la bicicleta estática no perdía detalle. Entraba a una tienda y rezaba para que me sucediese algo con lo que poder escribir un nuevo post...

Todo en vano.

Mis días son grises, anodinos, terriblemente aburridos. Convertirme de la noche a la mañana en opositora no ha hecho sino empeorar las cosas. Estoy cambiando. Ahora siento que todos me vigilan, que la gente acecha mis movimientos, que espía cada hoja que paso, cada tema que dejo atrás. Me siento en la biblioteca en la primera fila, de cara a la pared, aislada del mundo. Cuando llego no hay nadie, estoy sola. De repente, escucho un ruido a mis espaldas. Como si fuesen setas han aparecido detrás de mí hasta cuatro antiguos compañeros, todos ellos con mis mismos libros de preparación, cada uno en su mesa. Me miran.

No son paranoias mías. Cada uno me observa desde detrás de sus apuntes, y lo hacen con una mirada inquisidora, calibrando mis opciones y las suyas, mirando sucesivamente mi cabeza y el tema por el que voy estudiando.

Miran disimuladamente el reloj cuando me voy, contentos de que me marche antes que ellos, dándoles unas horas de ventaja. Tuercen el ceño contrariados cuando, al llegar, se dan cuenta de que ya estoy allí. Controlan todos mis movimientos, hacen ruido con los bolis para que no me pueda concentrar, avanzan más deprisa que yo para desmotivarme...

¿¿Cómo quereis que me suceda algo agradable en este estado??

Pero he llegado a casa y algo me ha hecho sonreír. Era la siguiente cita, que he corrido a pegar en un posit delante de mis ojos:


Para el que no entienda mi letra:

"Las oposiciones son el más sangriento espectáculo nacional después de los toros"
Gregorio Marañón.

Y no: el que lo haya pegado encima de El Guernica, no es una coincidencia.