Ayer vi Crash.
Que conste que no fui por el Oscar que le acaban de dar: quería verla desde hacía mucho, y hasta ayer no se presentó el momento adecuado.
La verdad es que con películas así da gusto, ni siquiera te importa pagar el precio de la entrada :) Desde el primer fotograma, desde las letras de créditos del comienzo, te das cuenta de que tienes delante de ti un peliculón con todas las letras. Sí, estoy impresionada, no lo puedo negar. Con Crash ríes, te emocionas, permaneces atento a cada uno de los detalles, de las palabras, sobrecogido ante todos los personajes que se deslizan por delante de tus ojos. La ciudad y el conflicto racial en toda su crudeza, sin moralizar, y sin embargo aprendiendo de cada personaje, bebiendo de ellos.
Por fin, cine en estado puro.
Lo cual a la que aquí escribe le produce una gran ilusión: a fin de cuentas, el cine es una fábrica de sueños. O, como creía Buñuel, el cine es la plasmación del sueño, su representación por medio del arte, un sueño colectivo. Merece la pena sentarte en la butaca, que se apaguen las luces, y soñar durante un par de horas con los personajes de Crash.
(Y vamos, le llegan a dar el Oscar a Brokeback y después veo Crash... Y me corto las venas)
3 comentarios:
Llego dando tumbos de blog en blog (como casi siempre). Mañan iré yo a ver Crash. A ver si coincido contigo.
Un beso desde mi mar
Sí, lo de dar tumbos es algo bastante corriente...
Espero que disfrutes de la peli tanto como yo.
Coincido completamente con tu opinión. A mi no me suele gustar ir al cine -considero que por norma general pago demasiado por muy poco servicio- y suelo ver poca televisión -para qué, con lo que ponen..- Pero el otro día vi Crash (reconozco que no de una forma muy legal). Me entusiasmo.
Me encantan las películas que cuentan una historia. De las que puedes llevarte algo contigo, de las que puedes aprender algo. Crash es una de esas películas.
No soy quien para juzgar si los planos son buenos, ni tan siquiera para opinar si un actor lo hace bien o mal. Pero esta película me llamó mucho la atención. Me gusta el enmarañamiento de historias. El rebatimiento de tópicos -que aunque sea EEUU, en Europa también tenemos lo nuestro..- y como todas las historias tienen dos caras aunque nosotros, como estupidos animales i-racionales que somos, no somos capaces de percibir o asimilar.
Es lamentable, pero no creo que la película guste a mucha gente. Necesitas cerebro para analizar la situación. Necesitas poder prestar atención más tiempo de lo que dura un Reaggeton -puaag-. Y lo peor, no es de acción, ni es de Spielberg.
Por una vez el Oscar está muy bien dado.
Me alegra encontrar a alguien con quien compartir gustos/emociones.
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